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Apostamos a que cuando has leído el título del artículo se te ha escapado una sonrisilla: “¿pues para qué van a servir? Para rodar sobre ellos” y sí, tienes razón, pero te prometemos que los neumáticos sirven para muchas más cosas, concretamente ¡para seis! Prueba a ver si las puedes sacarlas… y si no, sigue leyendo este artículo en el que te revelaremos las funciones concretas que tiene un neumático en nuestro vehículo.

Sin duda alguna un neumático es un elemento esencial en todo coche. Imagina un vehículo sin ellos, ¡no podría llevarnos a ningún lugar! Además, como hemos repetido en infinidad de ocasiones, los neumáticos son el único punto de contacto entre el vehículo y el asfalto, así que son uno de los elementos cruciales en lo que se refiere a conducción y seguridad. 

¡CURIOSIDAD! ¿Sabías que la superficie de cada neumático que está en contacto con el suelo no es más que la equivalente a una postal? ¡Esos pocos centímetros cuadrados marcan la diferencia!

Los neumáticos también nos ayudan a estar cómodos en nuestro vehículo, a adaptarnos al clima, a girar, a frenar… Pero veamos cada una de sus funciones una a una.

1. La función más básica: rodar

Pues sí, es la más básica porque sin ella entraríamos en nuestro coche… y ya. No habría viaje posible. Gracias al hecho de que los neumáticos rueden podemos desplazarnos entre diferentes puntos y así usar nuestro coche como medio de transporte. Para eso es crucial la forma que tienen: si no fueran redondos, no se podría circular.

2. La función secundaria: soportar

Cuando aceleramos y cuando frenamos el peso de nuestro coche soporta sobrecargas dinámicas que los neumáticos han de resistir. Además, cuando nuestro vehículo está parado, alguna parte ha de aguantar todo su peso. 

¡CURIOSIDAD! El peso medio de un coche es de 1400 kg.

3. La función que aporta comodidad: amortiguar

Cuando circulamos apenas nos damos cuenta pero la carretera tiene numerosas irregularidades que nos harían el viaje de lo más incómodo si no fuera por los amortiguadores y por los neumáticos. Te lo explicamos en la historia del neumático y te lo repetimos: las ruedas son sinónimo de comodidad y confort.

4. La función más mecánica: transmitir

Así es, al final cuando apretamos el acelerador si ese aumento de velocidad no se transmite desde el motor a la carretera, no podremos conducir. La potencia útil del motor también se transmite en otras situaciones tales como la frenada o los esfuerzos en curva.

5. La función esencial: guiar

Los neumáticos no solo nos llevan de un sitio a otro sino que, además, te ayudan a guiar el vehículo con total precisión durante cualquier condición climática y por cualquier tipo de suelo. Es importante que el vehículo vaya justo donde queremos que vaya y los neumáticos son básicos para lograr este cometido.

6. La función que todos esperan: durar

No por obvio es menos importante. La duración de un neumático depende de numerosos factores, entre ellos las condiciones de uso como el estilo de conducción, la velocidad que se suele emplear, el estado del coche, el tipo de carretera por el que solemos circular, si solemos conducir con el vehículo cargado o no así como la calidad del contacto con el suelo por el que circulamos. En este último aspecto, la presión de las ruedas tiene un papel fundamental ya que cuanta más presión menor será la zona de contacto (y viceversa).

Además, también has de saber que el desgaste no es el mismo en el eje delantero que en el trasero. ¿De qué dependerá? De cuál sea el eje de tracción del vehículo.

¿Hay alguna de estas funciones que te haya sorprendido? ¿Se te ocurre alguna más? Déjala en los comentarios, nos encantará leerte. 

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